Salvador Marco, Jefe de Taller, nos ofrece un análisis de los puntos clave a la hora de elegir el aceite para nuestro motor, qué sucede si utilizamos uno incorrecto y qué tipos hay en el mercado. Todos los secretos de este líquido, desvelados por Tallerator.es
En un motor de combustión interna como el de nuestro coche, a la hora de sustituir el aceite tenemos que conocer la calidad del lubricante que nos van a poner y la profesionalidad de quien va a realizar el cambio.
Más que aceites “malos” o de mala calidad, lo que sí puede ocurrir es que nos pongan un aceite no adaptado a las especificaciones del fabricante de nuestro vehículo. Esto ocasionará un mal funcionamiento del motor con graves consecuencias por una mala lubricación, o que no se protejan adecuadamente componentes del motor.
Problemas en el motor: http://bit.ly/1cECpf9
Que un aceite resulte más barato que otro va a depender principalmente de la marca y de la calidad indicada. Podemos encontrar aceites “de marca blanca” (por utilizar un lenguaje conocido) en hipermercados y tiendas especializadas a un precio diferente al de una marca reconocida. Esto sucede aunque ambas marcas tengan la misma calificación de calidad. Además, de una misma marca también podemos tener diferentes calidades a diferentes precios.
Entonces, ¿qué aceite ponemos en el motor de nuestro coche? Pues sencillamente el que el fabricante del vehículo recomienda. Una respuesta sencilla, pero esencial tenerla siempre en cuenta.
Por eso, lo primero que debemos de conocer es la norma de la viscosidad o SAE de aceite que requiere el motor. En un aceite 5W40 (un multigrado de base sintética muy habitual), “5W” se refiere a la fluidez o delgadez del aceite a bajas temperaturas: cuanto más bajo sea el número más facilita el arranque del motor, ya que puede ser bombeado más fácilmente a las zonas altas evitando su desgaste. Es un punto clave, pues es el momento en el que donde el motor sufre más. La «W» significa “Winter”, Invierno en inglés.
El segundo número, el “40”, se refiere al grado de viscosidad del aceite a temperaturas normales de operación del motor y se determina por la viscosidad cinemática del aceite a 100° C. Esta es la viscosidad con la que se protege al motor la mayor parte del tiempo.
Fluidez del aceite y desgaste del motor
Utilizar un aceite con un grado de fluidez alto (por ejemplo, un “15W40”, que según vemos ofrece una buena protección en bajas temperaturas) en un vehículo con más de 10 años y con un kilometraje elevado (lo que provoca un gran desgaste en las partes móviles del motor), va a ocasionar un consumo elevado de aceite debido a la fuga de este hacia la combustión por las holguras en el motor.
Por lo contrarío, en un motor actual, si sustituimos el aceite por uno de mayor viscosidad a bajas temperaturas, por ejemplo un “20W50”, en el arranque no tendremos una buena protección, ya que el motor tiene un mejor ajuste de sus piezas móviles. Por ello necesitaríamos un aceite más fluido. Aparte, por su densidad tarda más en llegar a las zonas altas del motor.
Entender las normativas
Además de la norma de la viscosidad del aceite o SAE, también los aceites se rigen por dos normas más.
Tenemos la norma API (American Petroleum Institute), que clasifica el aceite por su calidad mediante orden alfabético con dos grupos de dos letras. La primera indica si es para motor de gasolina (S) o para diesel (C). La segunda letra designa la calidad: cuanto más avance en el alfabeto mayor es la calidad.
Un ejemplo sería: “API SJ”. Según avanzan los años y la tecnología, también se avanza en su calidad.
Normativa API: http://bit.ly/19yh85B y http://bit.ly/JCGANd
Otra de la normas de calidad para los aceites de motor es la ACEA. Esta clasificación remplaza a la norma CCMC, la cual apareció debido a la exigencia de los motores europeos (de menor cilindrada pero con regímenes más elevados que los americanos).
Las normas ACEA están divididas en tres grupos:
- A para los motores de gasolina
- B para los motores diesel turismo
- E para los motores diesel vehículos utilitarios y camiones
Cada grupo posee varios niveles de calidad indicados por una cifra (1, 2, 3,..), seguida de las dos últimas cifras del año de introducción de la versión más reciente.
También hay que tener en cuenta que en ocasiones hay aceites que son específicos, como los “long life”, los destinados a vehículos diesel con “filtro de partículas” o los homologados específicamente para las marcas de coches, como los del grupo VW, Citroën, Renault, BMW, Mercedes o Ford.
La hora del cambio… de aceite
Después de conocer en profundidad las características de los aceites para poder saber cuál vamos a pedir que nos pongan en el motor de nuestro vehículo, también es importante determinar dónde y quién va a hacer el trabajo.
Por la situación económica que arrastramos desde hace unos cuantos años, esta pregunta es mas habitual que nunca. Y también sucede que todo el mundo se atreve a cambiar el aceite en su coche o en el de algún conocido.
Por supuesto, para tener una mínima garantía en el cambio de aceite, lo que deberíamos hacer es realizar el cambio en un taller autorizado, legal y si podemos tener buenas referencias, mejor. Además, si conseguimos el mejor precio, estupendo. No olvidemos que para facilitarnos esta labor tenemos a nuestra disposición el comparador de presupuestos mecánicos.
El cambio del aceite en un vehículo siempre se ha dicho que es algo sencillo, pero si te equivocas puedes tener graves consecuencias. No hay que tomarse a la ligera esta operación, tan habitual para un profesional de la mecánica: empezando por la elección del aceite y acabando por sustitución y próximo reemplazo.
Al final, el sustituir el aceite con estas premisas nos repercute en un buen estado del motor que hará que su longevidad sea elevada y no tengamos ningún problema grave en nuestro vehículo.
Fuente: Tallerator.es
