Descubrir que tu coche no arranca normalmente genera, además de la razonable angustia, una gran cantidad de preguntas sobre los motivos a los que puede deberse. En un primer momento, siempre nos planteamos que se trata de la batería. Pero, y si nuestra batería no es tan vieja como para dar fallos, ¿a qué puede deberse? Enumeramos algunos de los posibles motivos por los que tu coche puede no arrancar.
1.- La batería
En primer lugar, vamos a hacer mención a uno de los fallos más comunes por los que un coche puede no arrancar. Si la batería de tu coche ha llegado al final de su vida útil, algo que suele pasar cuando tiene unos cuatro años, tendrás que cambiarla; aunque la batería que viene cuando compramos el coche nuevo normalmente durará más que las que luego vayamos comprando. El precio medio de una batería está en unos 80 ó 90 euros aproximadamente.
Existen algunas alertas que te pueden indicar que la batería de tu coche está llegando al final de su vida útil. En primer lugar, si se te enciende el testigo de la batería en el cuadro de instrumentos, es un aviso de que la batería se está agotando. Además, otros síntomas son, por ejemplo, si notas que a tu vehículo le cuesta arrancar, las luces tiene menos potencia o van cambiando de intensidad, o si percibes fallos puntuales en la radio, los elevalunas… (es decir, que en el sistema eléctrico).
2.- El motor de arranque
Si tu coche no arranca también puede tener una avería en el motor de arranque; el precio de un motor de arranque puede ser de media de unso 70 euros aproximadamente. En este caso puede deberse a varios motivos:
- Que el fallo esté en la instalación eléctrica: puede darse el caso de que exista una mala conexión en los cables de un fusible, una clema, etc.
- Que fallen los componentes eléctricos: es decir, que la electricidad llegue correctamente pero falle algún elemento como, por ejemplo, un sensor, una bobina, etc.
- Que se produzca un fallo en las centralitas: si se produce un fallo en las centralitas de motor o de inyección, el coche no arrancará.
3.- La bomba de alta presión
En los motores de gasolina o diésel, la bomba de alta presión se encarga de suministrar al motor el combustible. Si no funciona correctamente al no enviar el combustible con la suficiente presión al motor, se generarán posibles problemas de arranque. El precio de una bomba de alta presión parte de unos 1.200 euros aproximadamente.
4.- Los inyectores
Los inyectores se encargan de dejar pasar el combustible justo a cada cilindro y su mal funcionamiento puede ocasionar que el coche no arranque porque no llega combustible a la cámara de combustión. El precio aproximado de los inyectores en los coches de gasolina es de unos 250 euros, y en los diésel de 500 euros.
5.- Roturas y desgastes mecánicos
Un desajuste de las válvulas, el desgaste en el árbol de levas (el precio se su reparación puede oscilar entre los 330 y los 540 euros)… y otras averías mecánicas que se producen por roturas o desgaste de dichos elementos en vehículos con muchos años de antigüedad, pueden provocar que al coche le cueste arrancar o que, en ocasiones no arranque.
6.- El código de la llave o el sistema de seguridad anti-robo
Todos los coches llevan un sistema de seguridad en la llave que puede hacer que el coche no arranque. En los vehículos más sencillos, cuando introducimos la llave, esta se comunica con el coche mediante un lector de códigos que hacen que el bombín de arranque se accione. Si este último se rompe, no podrás arrancar el coche.
Por otro lado, en los vehículos más modernos en los que no hay que introducir la llave en ningún bombín, el mando y el coche se comunican mediante de un código de arranque que se manda a través de ondas, y si el mando no tiene pilas o te encuentras en una zona con inhibidores de frecuencia, el coche no arrancará