El Tokyo Auto Salon -no confundir con el Salón Internacional del Automóvil de Tokio- es un evento japonés en el que multitud de fabricantes presentan vehículos con unas prestaciones excepcionales y una imagen muy alejada de lo ´homologable´. Podría decirse que es el SEMA japonés. Y la última edición ha tenido un indiscutible protagonista: Toyota.
¿La razón? La firma japonesa ha desvelado en dicho evento asiático el Toyota GR Super Sport Concept, un hyperdeportivo de carreras con un sistema de propulsión híbrido que entrega una potencia de nada más y nada menos que 1.000 CV. Del desarrollo de este modelo se ha encargado la división deportiva de la firma nipona, Gazoo Racing, y ha sido diseñado mirando de reojo a los prototipos que utiliza Toyota para competir en el WEC -el Mundial de Resistencia-.
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Concretamente, al automóvil que más recuerda es al Toyota TS050 Hybrid, con el que además de una estética similar comparte algunos de sus componentes. En donde más esfuerzo han puesto Toyota y Gazoo Racing ha sido en la aerodinámica de este GR Super Sport Concept, que cuenta con entradas de aire hasta en los pasos de rueda y que destaca igualmente a través de su gran alerón posterior y de una ´aleta de tiburón´ instalada en el techo que se extiende hasta el propio spoiler trasero.
Un motor de 1.000 CV
Además de la aerodinámica, lo más interesante de este hyperdeportivo es su sistema de propulsión. Es híbrido y desarrolla una potencia de 1.000 CV. Instala un bloque V6 biturbo de 2.4 litros en posición central trasera asistido por varios motores eléctricos. Por el momento la marca no ha difundido sus prestaciones oficiales, aunque con esta combinación de aerodinámica y potencia seguro que no defraudarán a nadie. ¿Lo malo? No puede utilizarse fuera del circuito -ni siquiera tiene faros-.
