Ford Focus: un veterano con ganas de marcha

El actual Ford Focus llegó al mercado en 1998, y la actual es su tercera generación, la cual llegó en 2011 si bien recibió un restyling en 2015, que aún se mantiene. Se trata de uno de los compactos más exitosos y un duro rival para los Seat León, Volkswagen Golf, Opel Astra, Honda Civic, Peugeot 308, Citroën C4, Mazda 3, Kia Cee´d o Hyundai i30.

Así es por fuera

El Ford Focus se vende con carrocería de 5 puertas o familiar, esta última por 750 euros más de media. Es un coche que guarda muchas similitudes estéticas con otros modelos de la marca del óvalo, como el Ford Fiesta, el C-Max o, incluso, el Mondeo. El restyling producido hace dos años trajo consigo cambios en el frontal y la trasera, con nuevos grupos ópticos, parrilla, paragolpes, y algunas variaciones en el diseño de las llantas y en los colores de la carrocería. El Focus de 5 puertas mide 4,35 metros de largo, mientras que el familiar Sportbreak crece hasta los 4,55 metros de longitud. Como dato curioso, el Focus aporta, en opción, unos protectores escamoteables en las puertas que evitan dañar la chapa de otros vehículos si, por descuido, las golpeas al abrir. Cuestan 150 euros.

Así es por dentro

El Ford Focus no es de los mejores compactos en lo que a habitabilidad se refiere (sobre todo en lo referente a anchura interior), aunque dos adultos pueden viajar de forma razonablemente holgada en las plazas traseras. Con un maletero de 363 litros de capacidad en su versión de 5 puertas, y 490 litros en la carrocería Sportbreak, tampoco es de los que mejor maletero ofrece. Por calidad de materiales se sitúa en la media, si bien su sistema multimedia no es una referencia en el segmento por rapidez o simplicidad. Sin embargo, el Focus sí ofrece una muy buena postura de conducción y una gran variedad de acabados y diferentes equipamientos.

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Así es su gama de motores

El Ford Focus es uno de los compactos con mayor riqueza mecánica. Los motores de gasolina son seis, a los que hay que sumar otros cuatro diésel y uno más de GLP. Respecto a los primeros, la gama arranca con un propulsor 1.0 EcoBoost de 100 o 125 CV, el cual se emplaza justo por debajo del 1.5 EcoBoost de 150 o 182 CV. Por encima, existen dos versiones deportivas: ST de 250 CV y RS de 350 CV, este último con un insólito sistema de tracción total. Respecto a los diésel, un bloque 1.5 TDCi sirve para definir dos variantes: 95 y 120 CV. Por encima, de un 2.0 TDCi derivan dos versiones: 150 y 182 CV (este último con acabado ST). Por último, la versión de GLP se basa en el veterano motor 1.6 de 117 CV, que ha sido adaptado para funcionar con este combustible. Todos los Focus se venden de serie con cambio manual de seis velocidades, pero existe una caja automática de doble embrague, denominada Powershift, que puede instalarse de forma opcional. Sus acabados son: Trend, Trend+, ST-Line, Titanium, ST y RS.

Así va

A pesar de su veteranía (si bien fue renovado en 2015, el modelo data de 2011), el Focus sigue manteniéndose como una referencia en lo que a comportamiento se refiere. Es ágil, dinámico, cómodo, su suspensión es muy buena, y su dirección resulta rápida y bastante informativa. Además, todos los motores dan muy buen resultado. Más allá del deportivo RS, los propulsores EcoBoost de gasolina ofrecen un gran rendimiento combinado con un consumo sorprendente. Por ejemplo, el Focus 1.0 de 125 CV gasta, según nuestras pruebas, 6,6 l/100 km, lo cual es buen dato. Los diésel 1.5 de nueva generación destacan aún más en este aspecto, con un consumo que supera por poco los 5 l/100 km.

• Lo mejor: Comportamiento, extensa gama de motores, precio competitivo.
• Lo peor: Habitabilidad y maletero por debajo de la media, sistema multimedia mejorable.

Versión recomendada: ST Line 5 puertas 1.5 TDCi 120 CV