Es, sin lugar a dudas, el modelo más vendido de Honda. En sus 40 años de historia, el Civic ha logrado llegar a más de 20 millones de hogares en todo el mundo, de los cuales, 112.000 eran españoles. Ahora, con su novena generación ya en las calle, la marca japonesa actualiza ligeramente el modelo actual para dotarle de una dinámica más deportiva.
Y es que los términos deportividad y Civic siempre han ido unidos de la mano. De ahí que para el ´model year´ de 2015, Honda no haya querido revolucionar sus sensaciones de conducción, centrándose más en sus apartados estéticos y de info-entretenimiento –en el que destaca el Honda Connect-.
Sin embargo, este nuevo Honda Civic sí cambia ligeramente sus esquemas de suspensiones para hacerlo un coche más firme. Por lo poco que pudimos conducirlo, no resulta incómodo pero sí es algo más seco que su predecesor. Sin embargo, según la marca, se ha llevado a cabo para afianzar su carácter deportivo. Ahora bien, se echa en falta que el acabado Sport, el cual la marca quiere potenciar, no cuente, como en otros rivales suyos, con un tarado específico o con selector de modos.
Otro de los sistemas que también se han revisado de cara a esta actualización, es el sistema de asistencia de estabilidad que actúa para maximizar la tracción en los virajes o al acelerar en superficies resbaladizas. Dicho sistema, acciona los frenos en una o más ruedas y reduce la potencia del motor para garantizar que el vehículo siga el curso correspondiente. Además, el sistema asegura también un mejor tacto con el pedal de freno.
Mantiene la oferta mecánica
Como ya hemos comentado con anterioridad, este reestilzado Civic no varía ni un ápice su oferta mecánica. Así, el compacto japonés, estará disponible desde marzo –mes en el que se lanza al mercado- con tres motores, dos de gasolina y un diesel.
El propulsor de acceso será el 1.4 i-VTEC de 100 CV que entrega un par máximo de 127 Nm a 4.800 rpm y que tiene un consumo combinado de 5,4 l/100 km, y está asociado a una transmisión manual de seis velocidades. El 1.8 i-VTEC de 130 CV se torna como el motor más potente de toda la gama –a la espera de la llegada del Type R-, ofreciendo un par máximo 300 Nm a 2.000 rpm y un consumo mixto de 6,1 litros. Se podrá asociar tanto al cambio manual de seis velocidades como al automático de cinco marchas. Sí, Honda ha preferido mantener esta transmisión automática, incluso siendo consciente de que sus rivales más directos ya ofrecen cajas de siete relaciones. En lo referente a la gama diesel, el gran y único protagonista seguirá siendo el exitoso 1.6 i-DTEC de 120 CV, con un par de 300 Nm a 2.000 rpm y con un consumo de 3,6 l/100 km.
Motores que estarán disponibles tanto para la carrocería cinco puertas como para la Tourer, a excepción, en este último, del 1.4 i-VTEC, que sólo se podrá elegir con el 1.8 i-VTEC y con el 1.6 i-DTEC.
