El Renault Clio protagoniza este nuevo vídeo de Autofácil, correspondiente además a la nueva serie Básicos Populares, en la que analizamos vehículos con las motorizaciones y equipamientos más sencillos, demostrando que no siempre es necesario optar por las versiones más caras para obtener un coche que cumpla con todas nuestras necesidades. Esta quinta generación, con su reciente restyling, se posiciona como una opción muy competente dentro del segmento de utilitarios.
En esta prueba, nos hemos centrado en la versión con el motor de 90 CV y el acabado Techno, que aunque es una de las configuraciones más básicas, no deja de ser sorprendentemente completa. Está disponible, en este acabado intermedio, por un precio de 19.300 euros. A lo largo de este análisis, exploraremos cómo se comporta en diferentes aspectos, desde su diseño exterior hasta su experiencia de conducción, y qué elementos opcionales podrían ser una buena inversión para mejorar aún más este modelo.
Aunque esta versión cuenta sólo con la etiqueta C de la DGT, recuerda que por 1.000 euros extra puedes optar por la versión con GLP de este motor, que proporciona 10 CV extra, un coste por km más parecido al de un diésel y, por supuesto, la etiqueta ECO de la DGT.
Por fuera: renovado y atractivo
El Renault Clio TCe 90 CV Techno ha pasado por un restyling en 2024 que lo hace destacar en el mercado de los urbanos. Aunque mantiene las líneas generales de la generación lanzada en 2019, la renovación es evidente, sobre todo en el frontal, que adopta la nueva identidad visual de Renault con luces diurnas en forma de patrones diagonales, un detalle estético que le da un toque moderno y distinguido. El color naranja Valencia, incluido de serie, es una elección llamativa que potencia su atractivo y hace que el coche no pase desapercibido.
Además de los cambios en el frontal, el diseño general del Clio sigue siendo compacto y proporcionado, con una longitud de 4,05 metros que lo convierte en una opción ideal para moverse en entornos urbanos. Las proporciones están bien equilibradas, y los detalles como las molduras cromadas (disponibles con el paquete Look) añaden un toque de sofisticación sin incrementar significativamente el precio.
Otro punto destacable es la calidad de los acabados exteriores. Renault ha sabido mantener una sensación de solidez y cuidado en los detalles, lo que da al Clio una presencia robusta y fiable. Aunque es un vehículo de precio moderado, no se han escatimado esfuerzos en ofrecer un aspecto exterior que compita de tú a tú con modelos más caros dentro de su segmento.
Equipamiento opcional que recomendamos
A pesar de ser una versión «básica», el Renault Clio Techno ofrece una amplia gama de opciones que pueden elevar significativamente su precio, pero también su confort y funcionalidad. Uno de los paquetes más recomendables es el Pack Look, que incluye detalles cromados en las ventanillas y puertas, además de llantas de 17 pulgadas, mejorando notablemente la estética del vehículo por un coste adicional de 420 euros. Esta opción es especialmente atractiva para aquellos que desean un toque extra de estilo sin sobrepasar el presupuesto.
Para quienes viven en climas fríos, el Pack Winter, con calefacción en asientos y volante, puede ser una adición valiosa por otros 420 euros. Este paquete no solo mejora la comodidad en invierno, sino que también aporta un nivel adicional de lujo y conveniencia que suele encontrarse en modelos de segmentos superiores. Aunque es prescindible en zonas de clima templado, es una inversión que vale la pena considerar en regiones con inviernos rigurosos.
El Pack City Premium es otra opción destacable, ideal para quienes se desenvuelven en entornos urbanos complejos. Incluye cámaras de visión perimétrica y sensores de aparcamiento, facilitando las maniobras en espacios reducidos. Aunque tiene un coste de 620 euros, puede ser un salvavidas en el día a día, especialmente en ciudades donde el aparcamiento es un desafío.
Más enemigos que Corea del Norte
El Renault Clio se enfrenta a una feroz competencia en el segmento de los urbanos. A su lado, encontramos rivales como el Dacia Sandero, que se posiciona como una opción extremadamente económica, o el Peugeot 208, que aporta un toque de sofisticación y dinamismo al segmento. Ambos modelos han conseguido una sólida base de clientes gracias a su combinación de precio y características, lo que hace que el Clio deba esforzarse aún más para destacarse.
Dentro del mismo grupo Stellantis, modelos como el Opel Corsa también presentan batalla. Este modelo comparte muchos componentes con el Peugeot 208, lo que le permite ofrecer una experiencia de conducción similar, pero con su propio carácter distintivo. El Corsa se ha ganado una reputación de fiabilidad y robustez, características que lo convierten en un competidor directo del Clio en muchos mercados.
Por otro lado, en el grupo Volkswagen, el Seat Ibiza y el Volkswagen Polo son opciones consolidadas que ofrecen una calidad percibida ligeramente superior. Estos modelos destacan por su refinamiento y una conducción más madura, lo que puede atraer a aquellos que buscan un coche con una sensación más premium.
Desde Asia, modelos como el Hyundai i20 o el Mazda 2, así como el Mitsubishi Colt, completan el amplio abanico de opciones que el Clio debe superar para mantenerse relevante. Cada uno de estos rivales presenta sus propias fortalezas, lo que obliga a Renault a ofrecer un paquete completo que no solo compita en precio, sino también en calidad, equipamiento y experiencia de conducción.
Por dentro: Convincente, pero no es un Captur
El interior del Renault Clio con acabado Techno destaca por su buena calidad de materiales y acabados, especialmente teniendo en cuenta su precio. Aunque no alcanza el nivel de sofisticación de un Captur, el Clio ofrece un entorno agradable con un buen ajuste de los componentes. Los controles físicos para el climatizador son un acierto para quienes prefieren evitar los sistemas táctiles, y la instrumentación digital opcional añade un toque moderno y personalizable, adaptándose a los diferentes modos de conducción.
La disposición de los elementos en el habitáculo está bien pensada, con una postura de conducción cómoda que facilita una experiencia agradable durante la conducción diaria. Sin embargo, este confort en las plazas delanteras tiene un coste: el espacio en las plazas traseras es algo limitado, especialmente en cuanto al espacio para las piernas. Esto hace que el Clio sea menos ideal para viajes largos con varios pasajeros, aunque sigue siendo adecuado para trayectos cortos y urbanos.
Además, la pantalla central, aunque no es la más avanzada, cumple bien su función, permitiendo la integración con sistemas como Apple CarPlay. A pesar de no incluir Android Automotive como en otros modelos de Renault, el sistema operativo R-Link sigue siendo funcional y fácil de usa. En resumen, el interior del Clio Techno es más que suficiente para el uso diario, pero aquellos que buscan una mayor sofisticación podrían considerar otros modelos dentro de la gama Renault.
En marcha: Un turbo puesto a punto con mimo
El motor 1.0 TCe de 90 CV del Renault Clio demuestra que no siempre se necesita una gran potencia para disfrutar de una conducción satisfactoria. Este pequeño propulsor de tres cilindros con turboalimentación ofrece un rendimiento adecuado para el día a día, combinando eficiencia y un comportamiento dinámico razonable. La caja de cambios manual de seis velocidades está bien escalonada, lo que facilita una conducción suave y agradable tanto en ciudad como en carretera. El tacto de la misma, por su parte, sólo se merece la calificación de aceptable.
Una de las características más destacadas de este motor es su suavidad de funcionamiento. A pesar de tratarse de un tres cilindros, las vibraciones son mínimas y apenas se perciben durante la conducción. El nivel de sonoridad también es bajo, lo que contribuye a una experiencia de conducción más relajada. Aunque el sistema Start-Stop podría mejorar en su efectividad, sobre todo en condiciones de calor, el motor en general se comporta de manera muy eficiente.
En cuanto a las prestaciones, el Clio TCe 90 CV se defiende bien en diferentes escenarios. En ciudad, se muestra ágil y fácil de manejar, mientras que en carretera ofrece una aceleración suficiente para adelantamientos seguros, aunque es recomendable planificarlos con cierta antelación. El consumo de combustible es otro punto a su favor, manteniéndose cercano a los 5,2 l/100 km en condiciones normales (a lata velocidad, es posible cosechar cifras entorno a los 6,2 l/100 km), lo que lo convierte en una opción económica para quienes buscan un coche urbano eficiente.
En opinión de Autofácil…
El Renault Clio TCe 90 CV Techno es una opción extremadamente sólida para aquellos que buscan un vehículo urbano accesible, pero bien equipado. Aunque no es el más potente ni el más lujoso de su segmento, cumple con creces en todos los aspectos importantes: diseño, equipamiento, y comportamiento en marcha. Su motor, aunque modesto, está bien afinado, proporcionando una experiencia de conducción satisfactoria y económica.
Este Clio demuestra que no siempre es necesario optar por las versiones más caras o potentes para obtener un coche que cumpla con todas nuestras necesidades diarias. Su diseño atractivo, junto con las opciones de personalización a través de paquetes opcionales, permite configurarlo según las preferencias y necesidades de cada usuario, sin que el precio se dispare de manera exagerada.
En resumen, este Clio básico, pero bien preparado, se gana nuestro sello de aprobación y se presenta como una de las mejores elecciones para aquellos que valoran el equilibrio entre calidad, precio y prestaciones. Renault ha logrado crear un producto honesto y competente que merece la pena considerar en el segmento de los urbanos.