Test&Charge: Renault Mégane EV60

Dibujamos las curvas de carga (potencia y energía vs estado de carga y tiempo) del Renault Mégane EV60 E-Tech Electric, que es la versión 100% eléctrica del Renault Mégane. Técnicamente está disponible con baterías de 40 kWh (Mégane EV40) y 60 kWh (Mégane EV60) de capacidad, aunque actualmente Renault sólo comercializa la versión EV60, que es la que hemos puesto a prueba.

El Mégane EV60 E-Tech 100% Eléctrico está disponible actualmente en dos acabados, denominados Techno e Iconic. La versión Tehcno cuesta desde 43.392 euros, mientras que la Iconic, que es la que hemos probado, sube hasta los 47.712 euros (estos precios, siempre, sin ayudas). Además de equipar una batería de 60 kWh, ambos acabados ofrecen un motor eléctrico en el tren delantero de 218 CV de potencia, alcanzan 160 km/h y aceleran de 0 a 100 km/h en 7,4 segundos.

En cuanto a la carga, Renault ofrece diferentes prestaciones en función de la batería y cuanto se pague. Las versiones con batería de 40 kWh (que no está refrigerada) pueden cargar a un pico de 85 kW en corriente continua, y de 7 o 22 kW en corriente alterna.

Con la batería de 60 kWh, la potencia pico aumenta hasta los 130 kW, y nuevamente se puede elegir entre un cargador embarcado de 7 o de 22 kW de potencia. Renault denomina Optimum Charge a su opción de carga más rápida, y es la única disponible con el acabado más completo, Iconic.

Test – Renault Megane EV60

Por fuera, este Mégane EV60 es un coche mediano, con una longitud de 4,20 metros y una altura contenida, de 1,51 metros, que lo sitúa a caballo entre los conceptos de compacto y SUV. Al natural, y aunque es más alto que un Mégane «convencional», disimula muy bien esa cota, y podría pasar por un compacto. Gran parte del mérito es del elevado morro, de la cintura alta y de la decoración bicolor.

En el interior, destaca la presencia de un sistema multimedia, instrumentación e interfaz de usuario basados en el sistema operativo Android Automotive. Esto permite contar con un interfaz que se comporta con mucha fluidez, además de disfrutar de algunas aplicaciones «clave» de Gooogle de manera nativa (como, por ejemplo, Google Maps, que puede mostrarse tanto en la consola central como en la instrumentación), Google Music o Google Podcast.

El potencial de este sistema multimedia, bautizado como OpenLink y sucesor de los EasyLink y RLink, es enorme. Especialmente, en lo que se refiere al acceso a aplicaciones desarrolladas por terceros, ya que puede instalarse cualquier aplicación que haya superado la homologación del fabricante y de Google para ejecutarse con seguridad durante la conducción. Hablamos de aplicaciones de música, como Spotify y Tidal, pero también de navegación para eléctricos, como A Better Route Planner.

A pesar de todo lo anterior, conviene advertir que el sistema está en su infancia, y que aún tiene una oferta limitada de aplicaciones y, en la unidad que hemos probado, algunos problemas de funcionamiento y estabilidad (de hecho, nos hemos visto obligados a reiniciar el navegador en varias ocasiones mientras tratábamos de utilizar el planificador de rutas eléctricas integrado en Maps). A pesar de todo, el sistema nos parece fantástico… y se trata de problemas que se resolverán (o que igual ya se han resuelto) mediante una actualización remota.

El resto del interior del Megane E-Tech EV60 es muy correcto. Los mandos tienen buen tacto, el salpicadero está rematado (en esta versión Iconic) con una madera «cortada por laser» de apariencia y tacto convincentes, y la postura de conducción es relativamente baja. La consola central está levemente orienta hacia el conductor (eso es bueno) y cuenta con una bandeja para cargar el móvil cuya esquina izquierda tiende (dependiendo de la estatura del conductor) a clavarse en la rodilla (y eso es bastante malo, además de incomprensible).

Las plazas traseras están muy bien (para la longitud del coche), y el maletero ofrece un buen volumen, aunque está limitado en anchura (no sueñes con meter una bolsa de palos de golf) y tiene un suelo que se encuentra unos 20 centímetros por debajo del borde de carga, lo que va a dificultar la introducción y extracción de objetos pesados.

En marcha, el Mégane E-Tech EV60 es un coche agradable y con un consumo moderado, aunque existen algunos detalles que nos gustaría que Renault hubiera pulido. En el lado positivo encontramos el tacto de dirección (rápida y precisa, que simplifica la conducción y aporta sensación de ligereza), mientras que en el negativo encontramos un tacto de freno impreciso y poco lineal, que anima a conducir haciendo uso de los niveles de regeneración seleccionables mediante las levas (este Mégane EV60 no incorpora regeneración adaptativa) para evitar «bambolear» a los pasajeros mientras procuras modular con precisión exquisita la presión y desplazamiento del pedal de freno.

Charge – Renault Megane EV60

La prueba de carga la hemos realizado en un Supercargador de Tesla, habilitado para entregar hasta 150 kW de potencia y en que siempre hemos tenido buenas experiencias. En este sentido, recordad que no todos los cargadores de Tesla están abiertos a vehículos de otras marcas. Las tarifas de los cargadores de Tesla se sitúan entre las más altas (0,75€/kWh durante las horas pico, que son entre 18:00 y 21:00), aunque aportan la tranquilidad de que todos los cargadores cuentan con muchos puestos.

El recorrido de aclimatación de la batería de este Mégane EV60 ha consistido en 175 km a velocidad máxima legal de autopista, con una temperatura exterior de aproximadamente 14 grados. El Mégane EV60 carece de termómetro de batería, pero consideramos que deberían de ser condiciones suficientes y adecuadas para acondicionar la batería a la temperatura adecuada para realizar la carga más rápida posible.

En cuanto a las promesas de la marca, Renault asegura que el Mégane EV60 es capaz de ganar 300 km de autonomía WLTP en 30 minutos. Como la autonomía homologada es de 454 km, estaríamos hablando de ganar un SoC o State of Charge de tan sólo el 66% en 30 minutos. Se trata de una promesa un poco menos ambiciosa que el habitual 70% en 30 minutos. Renault también promete una potencia pico de recarga de 130 kW.

Potencia vs Estado de Carga SoC – Renault Mégane EV60

Comenzando por la curva de Potencia vs Estado de Carga, vemos que el Mégane EV60 ofrece una curva bastante picuda. Los 130 kW de potencia se obtienen durante virtualmente segundos, para descender inmediatamente con una pendiente pronunciada. En este sentido, estaríamos ante una típica gráfica «jugador de baloncesto», en la que la potencia salta alto y desciende deprisa. Con una gráfica tan afilada, debemos concluir que los 130 kW anunciados son más bien un ardid de marketing, y la prueba de conviene realizar este tipo de ensayos para dibujar la forma real de la curva.

El descenso de potencia desde esos 130 kW es bastante lineal, de manera que no existe una zona clara en la que sea recomendable cargar el Mégane EV60… aunque donde mejor se comporta es entre el 10 y el 40%. Hacia el 70%, la potencia de carga comienza a descender por debajo de los 50 kW que suelen entregar los cargadores más habituales… de manera que, durante una parada para recargar en viaje, comenzaremos a «perder tiempo» a partir de ese 80%. Un poco antes del 90% partir del 90%, la velocidad cae a unos 22 kW, y no merece la pena seguir con la carga.

El coeficiente de mantenimiento (medido como el % en el que la carga se mantiene por encima del 85% de la potencia máxima de carga) se sitúa en alrededor del 16%, lo que certifica numéricamente que estamos ante una curva de carga muy picuda.

Estado de carga (SoC) vs Tiempo – Renault Mégane EV60

Cronómetro en mano, el Mégane EV60 ha tardado un poco más de 41 minutos en cargarse del 10% al 80%. Aunque se trata de una cifra coherente con lo anunciado por el fabricante, se encuentra por detrás de los habituales 30 minutos.

En viajes, este retraso (hablamos de un 36% más de lo habitual) puede suponer un inconveniente. Teniendo en cuenta que, en los viajes, trabajamos con un 70% de la carga total, que corresponde a 42 kWh, y que los consumos oscilan entre los 16 y los 19 kWh/100 km, con el Mégane EV60 tendríamos que realizar paradas de 41 minutos cada 233 kilómetros. Para completar un viaje de 1.000 kilómetros en autopista, necesitaríamos parar 5 veces y tardaríamos en completarlo aproximadamente 11,5 horas.