El Tesla Model S Plaid es oficialmente el coche eléctrico de producción más rápido en Nürburgring. Dotada con una unidad eléctrica de más de 1.000 CV de potencia, la berlina eléctrica de la compañía de Elon Musk consiguió el pasado viernes marcar un espectacular registro de 7:30.909 sobre el trazado alemán. Si lo comparamos con el anterior récord establecido por el Porsche Taycan en agosto de 2019, la vuelta completada por el modelo estadounidense es 11,431 segundos más rápida. El registro corresponde al trazado de 20,8 kilómetros.
Al poco tiempo de establecer el récord, Elon Musk celebraba la hazaña a través de su perfil de Twitter compartiendo una imagen que revelaba los tiempos de vuelta logrados por el Model S Plaid. En este mismo comunicado, el CEO de Tesla aclaraba que la unidad empleada para el intento no contaba con ninguna modificación y se trataba de un modelo de serie recién salido de fábrica. A su vez, Musk ha confirmado que en las próximas semanas un Model S Plaid con nuevas “superficies aerodinámicas, frenos de carbono y neumáticos de pista” buscará establecer un nuevo récord de vuelta en Nürburgring.
Con este 7:30.909, el Tesla Model S Plaid consigue un tiempo de vuelta muy similar al de otras berlinas de producción asociadas a motores de combustión. Entre estos modelos encontramos al Porsche Panamera Turbo (7:29,810), el Mercedes-AMG GT 63 S (7:23,009) y el Jaguar XE SV Project 8 (7:18,361).
El nuevo Model S Plaid equipa tres motores eléctricos (uno en el eje delantero, dos en el trasero), capaces de entregar 1.020 CV de manera conjunta. Una cifra escalofriante que se ve respaldada por la tracción total que ya disfrutaba el modelo. Esta configuración permite al modelo estadounidense alcanzar los 322 km/h y acelerar de 0 a 100 en 2,1 segundos. A su vez, anuncia una autonomía eléctrica de hasta 628 kilómetros de distancia.