Según un informe reciente del medio alemán Handelsblatt, el lanzamiento del esperado Volkswagen Trinity EV, concebido como el por fin verdadero antiTesla del grupo, ha sido aplazado hasta finales de 2032. Esta decisión forma parte de una reevaluación integral de la inversión en productos, abanderada por el CEO del Grupo VW, Oliver Blume.
El retraso en la producción del Trinity, inicialmente programado para 2026 y ya una vez retrasado hasta 2029, se ha decidido con la intención de aprovechar mejor las plataformas de los vehículos eléctricos actuales.
Las plataformas MEB, utilizadas por las marcas generalistas del grupo, y PPE para las más Premium, se mantendrán operativas más tiempo del previsto para maximizar la amortización de los costes de inversión.
Así, la plataforma MEB se actualizará a MEB+ en 2026, mientras que la PPE recibirá una actualización de software en los próximos tres años, gracias al apoyo del nuevo socio tecnológico del Grupo VW, Rivian.
BEV: nuevos Golf y nuevos GTI
Frente al aplazamiento del Trinity, Volkswagen planea adelantar el lanzamiento de un nuevo Golf completamente eléctrico, denominado internamente como ID Golf, que se espera para 2029. Este modelo será el primer vehículo de la marca en utilizar la nueva Plataforma de Sistemas Escalables (SSP), una arquitectura de software avanzada que promete, en palabras del fabricante, revolucionar la experiencia de conducción eléctrica.
Por su parte, Audi lanzará su A4 eléctrico a finales de 2028, marcando la pauta como la primera marca del Grupo VW en adoptar esta plataforma SSP.
Otras modificaciones en la línea de tiempo incluyen el sucesor del VW ID.4, cuya llegada basada en la SSP se retrasa a 2030, y el crossover totalmente eléctrico VW T-Sport, que se pospone hasta 2031.
Estos ajustes son indicativos de una respuesta estratégica a la actual desaceleración del mercado de vehículos eléctricos y el imperativo de eficiencia de costos impulsado por Blume.
En el mercado español, las ventas de ID.3 caen en lo que va de año un 29 por ciento; las del ID.4, el 42 por ciento y las del ID.5, un 39 por ciento, con una importancia de los BEV en las ventas totales de la marca en nuestro país de poco más del 2 por ciento.
El desarrollo de software sigue siendo un área crítica para el Grupo Volkswagen. Con retrasos atribuidos a la filial de software Cariad, la compañía ha tomado medidas para rectificar estos desafíos mediante colaboraciones con Rivian y la empresa china Xpeng. Estos esfuerzos buscan solventar problemas de gestión e inversiones en el desarrollo de sistemas de asistencia al conductor e interfaces, áreas que han suscitado críticas y reducido la satisfacción del cliente.
Volkswagen también está redefiniendo su línea de deportivos con el regreso del icónico emblema GTI, esta vez en modelos eléctricos. El futuro ID.2 GTI, previsto para 2026, se basará en la plataforma MEB y está diseñado para ofrecer una experiencia de conducción dinámica y ágil, similar a la de un kart.
Según Kai Grünitz, jefe de desarrollo técnico de Volkswagen, este modelo priorizará la maniobrabilidad y el placer de conducción sobre la pura potencia, marcando una clara distinción de sus predecesores. Esta estrategia no solo representa un homenaje a la herencia deportiva de Volkswagen, sino que también establece un nuevo estándar en la categoría de compactos eléctricos. El emblemático Golf eléctrico también tendrá su versión GTI asociada a la plataforma SSP del grupo.
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