Estamos ante la prueba más importante del año; no para nosotros… sino para Ford -que ’se la juega’ con este modelo… en todo el mundo- y, sobre todo, para muchísimos lectores que, en el último año -el tiempo que ha pasado desde que se mostró la primera imagen hasta que el coche en sí se ha puesto a la venta-, nos han ‘bombardeado’ con preguntas acerca de él.
Hablamos del nuevo Ford Focus 1.6 TDCI Titanium : un nombre conocido, pues Ford lo viene usando desde 1998, año en el que lanzó la primera generación de este compacto que, a su vez, vino a reemplazar al popular Escort.
Durante sus -hasta el momento- 13 años de vida ha ocupado de forma habitual el primer puesto en los listados de ventas gracias a tener virtudes como un precio competitivo, una gama muy amplia y, sobre todo, un excelente comportamiento en carretera.
Todo eso también lo ofrece la tercera generación del Focus, que acaba de ponerse a la venta… y que rivaliza con modelos tan buenos como el Renault Mégane, el Citroën C4 o el Opel Astra, que cuentan con todas esas virtudes…
Entonces, ¿qué ofrece diferente?
Nosotros pretendemos descubrir con este súper test si el último Focus puede volver a ser el más vendido ahora que tiene mejores rivales que nunca. Comenzando por la estética, el coche se ha renovado por completo; falta le hacía porque fue uno de los puntos más criticados de la anterior generación.
El cambio ha sido radical, perdiendo incluso uno de los rasgos de identidad fundamentales de su antecesor: los faros traseros en posición elevada.
En conjunto, ahora el Focus es uno de los compactos más atractivos, modernos y deportivos -a eso le ayudan sus generosos 1,82 m de anchura-, pero, además, su estilo resulta ‘conocido’: no provoca el impacto que causó el primer Focus allá por 1998.
¿Qué le podemos reprochar? Que, en principio, no se pueda adquirir con una carrocería de tres puertas que sí está disponible en la mayoría de sus rivales. Aunque es muy posible que, a medio plazo, Ford venda una versión coupé que ocuparía ese lugar dentro de la gama.
Por dentro, se ‘lo han currado’
El interior ‘impacta’ más que el exterior; por diseño, tiene el salpicadero más elaborado de todo el segmento, y sólo el Opel Astra o el Alfa Giulietta se le acercan.
Su apariencia -inspirada en la del monovolumen C-Max- es muy buena, transmite la sensación de ser un coche actual… y su diseño, que no tiene nada que ver con el de su antecesor, resulta muy ‘envolvente’: quien se siente al volante tendrá la sensación de ir muy ‘integrado’ en el puesto de conducción -algo habitual en los BMW-.
Como contrapartida, ahora hay más mandos y botones que conviene ‘aprenderse’ antes de conducir… y que son un reflejo de toda la tecnología que, como iremos viendo, puede llevar este coche. En cuanto a la calidad, no hay pegas; seguimos pensando que el VW Golf está a otro nivel, pero el Focus es de los que más se le acercan .
Por último, la habitabilidad no es lo más destacable de este nuevo modelo; ocupa un correcto puesto intermedio en su segmento, pero ni es más grande que su predecesor ni que los líderes del segmento -Astra, Golf…-. Como en éstos, cuatro adultos viajan más que bien, pero en la competencia tendrán la sensación de que van algo más ‘desahogados’.
Lo que le hace ser muy especial
Donde el nuevo Focus brilla como ningún rival es en lo que respecta a tecnología; ofrece elementos de seguridad y confort que no pueden llevar otros compactos premium como el Audi A3 o el BMW Serie 1; la gran mayoría de ellos se engloba en un pack denominado Tech Titanium, que cuesta 1.150€ y que incluye todo lo siguiente: un sistema que, en ciudad -y hasta unos 30 km/h- es capaz de frenar el coche si te distraes y él detecta que podrías chocar contra otro vehículo; otro que te avisa si ‘abandonas’ el carril -mediante vibraciones en el volante- y que, incluso, realiza correcciones sobre la dirección para devolverte al camino correcto; uno más que, mediante luces en los retrovisores advierte al conductor de la presencia de coches en los ángulos muertos de su campo de visión; otro que detecta la fatiga del conductor y que le avisa; otro más capaz de ‘leer’ la señales de velocidad y mostrarlas en el cuadro de mandos; y uno que circulando de noche cambia por sí solo de luz larga a corta.
Y eso no es todo: por 900€ dispone de un control de velocidad inteligente que acelera y frena el vehículo para, en carretera, mantener una distancia prefijada con el vehículo que circula por delante; y por 360€ dispone de un dispositivo capaz de aparcar el coche por sí solo.
Cómo mejorar algo ya de por sí bueno
El nuevo Focus comparte plataforma con el C-Max; es decir, emplea la ‘base’ de su antecesor, pero muy mejorada.
Lo primero que percibes en marcha es que el coche absorbe muy bien las irregularidades -lo que llamamos ‘calidad de rodadura’– pero sin ‘aislarte’ por completo de la carretera; no es tan comodísimo como un Citroën C4, pero sí mucho más ‘informativo’ -permite conocer mejor dónde están los límites del vehículo… y eso aporta seguridad-.
Otra de las cosas que más llaman la atención es lo rápido que puede rodar en zona de curvas, gracias a que tiene una ‘mezcla’ de agilidad, estabilidad y aplomo que le convierten en la nueva referencia en el segmento.
Ayuda la dirección: es nueva y, aunque ahora tiene asistencia eléctrica -permite ahorrar combustible- y ya no es tan ’sensible’ como la de su antecesor, resulta de lo mejorcito por precisión, rapidez, agrado…
Finalmente, los frenos son también muy buenos: cuenta con discos de gran tamaño y un pedal que permite dosificarlos a la perfección -para frenar en la cantidad justa-, aparte de resultar potentes, no cansarse con facilidad…
Un muy buen punto intermedio
La versión más equilibrada de la gama cuenta con un nuevo motor 1.6 TDCi que rinde 115 CV y que sustituye a su predecesor de 109 CV. Respecto a su éste, el nuevo resulta más ‘refinado’ -vibra menos- y como el coche está mejor aislado también se muestra más silencioso; pero lo mejor de todo es lo poco que consume.
Gracias al sistema Stop/Start o a la mejorada aerodinámica del vehículo, es muy sencillo rondar los 5,0 litros de media y hacer casi 900 km con un depósito; en este aspecto se sitúa junto a los mejores del segmento.
En cuanto a las prestaciones, no es más rápido que su antecesor -aún así, es de los mejores entre los compactos diesel de su potencia-, pero el motor sí tiene mejor respuesta a bajas vueltas -su empuje es bueno desde apenas 1.500 rpm- y llega hasta las 4.500 rpm con ‘fuerza’ -algo que viene bien, por ej., para acabar un adelantamiento apurado-; es decir, cumple de sobra para el 90% de los conductores de un modelo así.
Esta mecánica sólo se vende con una caja manual de seis marchas de tacto agradable, duro… aunque con unos recorridos algo largos; además, el reposabrazos central molesta al introducir las marchas pares -2ª, 4ª ó 6ª-.
¿Qué sacamos en claro?
La primera conclusión es… la que ya suponíamos: el nuevo Focus es mejor que su antecesor en todo -salvo en espacio interior-. Y, además, aporta un extra de tecnología, diseño y buena relación precio/equipamiento frente a sus rivales; por eso se convierte en la nueva referencia.
Además…
¿Qué radio lleva de serie?.- Cuenta con una radio CD con conexión auxiliar y USB y cuatro altavoces. Su calidad de sonido es correcta y dispone de mandos en el volante.
Si quieres más… Por 260€ se ofrece un equipo con seis altavoces en total, control de funciones por voz y un display de 3,5″. La mejor alternativa, pero también la más cara -600€- es instalar el equipo de audio Sony, con pantalla de 4,2″, nueve altavoces y una muy buena calidad de sonido. Finalmente, por 900€ puede llevar un navegador con pantalla de 5″.
¿Qué lleva de serie?.- 1.- El volante y pomo forrados en cuero: de serie.2.- Equipo de audio Sony: 600€.3.- Arranque por botón: 360€.4.- Asientos de cuero: 850 euros.
Otras opciones.- Los colores azul y rojo son gratis. Aparte, hay diez tonos más que cuestan entre 180 y 650€.
Y además.- De serie incluye llantas de 16″ pero puede equipar otras de 17″ por 350€ -en un pack que incluye lunas tintadas-, o de 18″ por 500€.Por 500€ dispone de techo solar -no es panorámico, como el de sus rivales-; por 200€ ofrece lunas oscurecidas. bixenón por 850€
Caben cinco, pero el conductor es el privilegiado
Delante
Al volante.- La postura de conducción es muy buena -el volante tiene amplios reglajes- y la consola central es enorme, pero no molesta a la pierna del conductor.Asientos… Su mullido es cómodo y por diseño sujetan muy bien en las curvas; sólo el del conductor tiene reglaje en altura -y de forma manual-.Y, además… Laaccesibilidad es buena porque las puertas se abren mucho… pero el diseño del salpicadero ‘roba’ un poco de espacio al entrar.
Detrás
Detrás es de los mejores por altura… mientras que por anchura y espacio para las piernas está en la media; añade cosas a su favor, como el gran espacio para los pies que hay bajo los asientos delanteros. Lo malo es que el ocupante de la plaza central tiene poco espacio para las piernas.
Maletero
Cuenta con 363 litros -sus rivales, entre 350 y 408 l-; no es una cifra mala y la capacidad es muy aprovechable por el diseño cúbico del maletero, el amplio portón… Sin embargo, no lleva rueda de repuesto .
Cada vez más cerca de los mejores -es decir, del Golf-
Mientras que el salpicadero de su antecesor transmitía la sensación de ‘coche barato’ -por sus trazos rectos, los plásticos, sus mandos algo simples…-, el nuevo ‘da gusto’ verlo: es mucho más vistoso y también bastante más ‘voluminoso’.
Lo más destacable.-La calidad de los materiales no tiene absolutamente nada que ver con la de su predecesor -que no era mala, pero estaba lejos de la del nuevo Focus-. Ahora, emplea plásticos blandos en prácticamente todo el habitáculo y los ajustes de los mismos, que ya eran buenos antes, han mejorado también.
Barroco.-Volante, instrumentación, equipo de audio… se ha cuidado el diseño de todos los elementos. En total, el salpicadero del acabado más completo, el Titanium de la prueba, cuenta con cerca de 80 botones. Todos tienen buen tacto, quedan bastante a mano y son sencillos de manejar… aunque los de la radio resultan algo pequeños y los del volante -para gobernar desde el control de velocidad hasta el completo ordenador, la radio…- no son del todo intuitivos.
Práctico.-La guantera principal es enorme… y tan profunda que cuesta llegar al fondo. También hay huecos en las cuatro puertas, otro cajón entre los asientos y uno más a la izquierda del volante -estos dos últimos con tapa-. El interior está muy bien iluminado gracias a unas luces con Led muy potentes -algo que no usa ningún rival-.
Cómo va
Así va en carretera.-Ejemplar…Seguro, estable, ágil y rápido adelantando: es un coche ‘familiar’… pero divertido cuando el conductor viaja solo.
Así va en ciudad.-Se defiende…No es muy largo… aunque sí bastante ancho -ojo en los párkings-. Sus paragolpes están muy expuestos a los roces.
Así va en autopista.-Aplomado…Buen ‘viajero’, cómodo para largos viajes y con suficiente potencia para que nunca se quede ‘colgado’. De los mejores.
Lo que otros no te cuentan
¿Por qué? .-De serie, incluye un kit repara-pinchazos; en opción, la marca ofrece una rueda de emergencia por 70 euros -en ninguno de los dos casos se deben superar los 80 km/h- .
¿Y qué tal es?.-Por fiabilidad: Teniendo en cuenta que tanto el motor como la plataforma son profundas evoluciones de los del anterior Focus, y que éste -según Dekra- siempre ocupaba entre el tercer y séptimo puesto de los modelos más fiables del segmento, en teoría debería ofrecer muy buen resultado.
Por seguridad: Aún no ha sido sometido a las pruebas de choque de EuroNCAP, pero su antecesor, hace siete años, ya conseguía la máxima puntuación -5 estrellas-. Cualquier cosa que no sea eso, sería una sorpresa en el nuevo Focus…
¡Su ‘antecesor’!.-La anterior generación del Focus apareció en 2004 y tuvo un restyling en 2008. Contaba con cinco carrocerías -3p, 4p, 5p, familiar y cabrio- y motores de 90 a 350 CV. Sigue a la venta, sólo con propulsores 1.6, desde 13.350 euros.
No en todos.-Los bonitos faros traseros con Led’s sólo los lleva el acabado superior Titanium -el Trend lleva bombillas convencionales, que duran menos-..
¿Sirve de algo?.-Estas entradas de aire a los lados del paragolpes sólo cumplen una función estética; eso sí, quedan muy ‘resultonas’.
Curioso.-Es llamativo que un coche tan avanzado no pueda incluir, ni en opción, freno de mano por botón: se acciona mediante esta voluminosa palanca.
Bien pensado…Tras la parrilla hay una rejilla que se cierra automáticamente cuando el motor no necesita refrigeración; así se mejora la aerodinámica y se reduce el consumo. .
Original .-Los faros bixenón – 850€- incluyen un sistema de iluminación interior ambiental con Led´s, que ofrecen luz en hasta siete colores distintos..
La gama Ford Focus 1.6 TDCI (2011) Titanium
Todos los sistemas ahora son mejores.- Visibilidad
– Superficie de barrido *****
– Velocidad de barrido ****
– Visibilidad delantera ****
– Visibilidad trasera **
– Retrovisores ****
Hacia delante es buena: los ‘limpia’ barren mucho, bien y en silencio; los retrovisores son muy amplios, pero la luna trasera es pequeña y limita la visibilidad.
Alumbrado
– Cortas ****
– Largas ****
– Reglaje de faros ***
Las luces halógenas de serie ya alumbran bien, pero el kit bixenón opcional es de los más potentes del segmento. Cuesta 850€ e incluye unas vistosas luces diurnas por Led’s. Los antiniebla son de serie.
Comodidad
– Asientos delanteros ****
– Reglajes conductor ****
– Asientos traseros ***
– Posición de mandos ****
Sin ser el más amplio, sí que resulta muy cómodo: los asientos son muy buenos y los mandos, aunque numerosísimos, están bien distribuidos según las funciones -clima, radio.–.
Climatización
– Eficacia ****
– Ergonomía ****
– Nivel sonoro ***
El Titanium lleva de serie un climatizador bizona muy eficaz, con múltiples salidas de aire -aunque no para las plazas traseras- y sencillo de manejar.
Datos oficiales Ford Focus 1.6 TDCI Titanium
Prueba de potencia
Medidas
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