Sí, porque este nuevo Superb nace a partir de la plataforma modular MQB que el grupo ya emplea en modelos como el propio Passat, el Golf, el Audi A3, el Seat León€ y que además de ahorrar costes, consigue aumentar su dinamismo. De hecho, este Superb III es un vehículo más ligero que su predecesor, 75 kg para ser más exactos al tiempo que mejora su aerodinámica logrando un Cx de 0,27 (frente a los 0,29 del antecesor).
Sin embargo, la principal novedad de este nuevo Superb es la incorporación del nuevo control de chasis dinámico DCC mediante el cual, el conductor podrá elegir entre cuatro modos de conducción –Eco-Normal,Sport e Individual- dependiendo de las circunstancias de la vía. Ello le confiere a esta berlina de 4,86 metros de largo un dinamismo superior al de sus rivales al tiempo que le brinda un confort de marcha mucho mayor.
Dinamismo que también viene determinado por una amplia gama de motorizaciones compuesta una variante de gasolina, 1.4 TSI de 150 CV, y tres diesel, un 1.6 TDI de 120 CV y dos 2.0 TDI de 150 y 190 CV-. Más adelante se completará con los 1.4 TSI de 125 CV, 1.8 TSI de 160 y 2.0 TSI de 220 y 280 CV, siendo este último el Superb más potente de la historia.
Durante la toma de contacto por las carreteras de la región de La Toscana –el recorrido discurrió entre Florencia y Siena- nuestras elecciones fueron los dos propulsores de 150 CV. El gasolina se mostró como un propulsor verdaderamente suave, casi sin vibraciones y con una elasticidad inmejorable que va desde las 1.500 hasta las 3.000 rpm. Eso sí, en la unidad que nos tocó probar, percibimos una falta de potencia en el tránsito de las primeras marchas, sobre todo entre las 2.000 y las 2.150 rpm cuando, de nuevo, notábamos el empuje con fuerza. Este propulsor se asocia a un cambio manual de seis relaciones, con un tacto suave, preciso y con unos desarrollos enfocados hacia el consumo.
Un gasto de combustible que se ve reducido gracias, sobre todo, a la implantación del sistema de desconexión de cilindros, el cual, desconecta 2 de los 4 cilindros disponibles cuando circulamos a velocidad constante para, según la marca, ahorrarnos 0,5 l/100 km. Lo cierto es que el dato oficial marca unos excelentes 4,8 l/100 km aunque en condiciones normales se superarán los 5,5 litros con facilidad.
En cuanto al diésel de 150 CV, es un motor que se deja notar más, sobre todo desde el arranque, aunque bien es cierto que dada la excelente insonorización del habitáculo, su ruido no es para nada molesto. Su mayor par, 340 Nm y un consumo real cercano a los 5,3 l/100 km –el homologado es de 4 litros- le convierten en la opción mejor posicionada de toda la gama, con permiso del 1.6 de 120 CV el cual, pese a ofrecer un consumo homologado de 3,9 l/100 km pensamos que puede llegar a quedarse algo corto de potencia en determinadas circunstancias, como adelantamientos, recuperaciones?