Hace muy pocos meses se produjo un importantísimo movimiento en la industria automovilística: PSA Peugeot Citroën compró la marca Opel al gigante estadounidense General Motors. Desde entonces han surgido muchas dudas acerca del posicionamiento que el conglomerado francés quiere otorgar a su nueva adquisición, pero poco a poco parce que las cosas se van aclarando.
Así las cosas, este jueves 9 de noviembre el actual CEO de Opel, Michael Lohscheller, presentará su nuevo plan estratégico. En su discurso estará presente Carlos Tavares, el mandamás de PSA Peugeot Citroën, y lo que anunciará será que la gama de modelos de Opel se reducirá considerablemente para concentrarse en los coches que más margen de beneficio les están aportando, según apunta el rotativo alemán Frankfurter Allgemeine Zeitung.
Y esa no es la única sorpresa que prepara Opel, ya que a partir de ahora se espera que se centre en el desarrollo y la producción de vehículos con un sistema de propulsión eléctrico. Además, tendrá que ponerse al día, pues Tavares ha asegurado que «las fábricas de PSA son más eficientes y productivas que las de Opel». No obstante, parece que las decisiones a tomar no irán en contra de mantener la plantilla de la marca alemana del rayo.
De este modo, a la reconversión del centro técnico de Rüsselsheim en un espacio dedicado casi en exclusiva a la electrificación habría que sumar la unión del departamento de compras de Opel con el de PSA Peugeot Citroën. Ese es el plan principal que hay para dejar en el olvido las mecánicas y la tecnología de General Motors, transformando los futuros motores y cajas de cambio de Opel en más eficientes.
En cualquier caso, es demasiado atrevido a aventurarse a adivinar -por el momento- los modelos que desaparecerán, aunque es posible hacerse una idea de cuáles son los Opel con menos éxito; así que lo único que podemos hacer es aguardar novedades.
