Conocí los productos GWM hace un año en el Salón de París. Entonces vi el actual Wey 05 -20 cm más largo que el coche que nos ocupa en esta prueba-, y los eléctricos ORA -simpático en diseño el 03, menos digerible como comprador el 07-.
Aquellos primeros Wey eran voluminosos, masivos, con exceso de cromado, con parrillas desmesuradas para mi gusto estético e intentando pensar como un usuario europeo.
Prueba: GWM Wey 03
Ahora me enfrento a la prueba de conducción del GWM Wey 03 y me reafirmo en lo visto entonces: coche que parece realizado más de dentro hacia afuera que al revés. El interior te impacta, el exterior, menos. El interior atrae tu sentido visual, el del tacto, el del oído -buena calidad acústica de cierre en puertas y manetas-. El exterior te dice menos, un SUV más, marcado por un frontal donde la parrilla todo lo puede.
Ajustes y materiales más que notables los que nos encontramos en este Wey 03 en esta primera toma de contacto. Ambiente interior muy tech, sin apenas botonería -los fabricantes europeos entraron en esa dinámica y están saliendo de ella-, con esa pantalla doble central sumando 14,6” y 9,2”, pero con funcionamiento y visibilidad por pulir, con esos “guateados” mullidos en salpicaderos, asientos y puertas queriendo jugar a ser Premium...
Frontalmente un cuadro de 9” lo suficientemente informativo para no desplazar la atención a otras pantallas satélites, pero no tan diminuto como los de los Volkswagen ID o Ford Mach-e. Además, otro plus, la suma en el caso del Wey 03 del siempre útil head-up display.
GWM Wey 03: así es por fuera
El GWM Wey 03 es un coche, repetimos, voluminoso al ojo y voluminoso al metro. 4,67 metros de longitud -casi segmento D-, pero con mucha altura -1,73m- y anchura -1,89m- que aportan amplitud visual y real. Mucho espacio para piernas y cabezas en cualquiera de sus cinco plazas, aunque la línea de la ventanilla trasera es alta y puede perjudicar visión de los más bajitos.
Es verdad que es un coche al que hay que subir y bajar, la línea de acceso al habitáculo es alta y te obligará a que tus piernas rocen con el montante inferior. Es el precio en forma de espacio que se cobra el poner 34 kWh de baterías. Esto hace que al final vayas muy alto, y aunque la batería rebaja el centro de gravedad, no puede evitar que el coche al conducirlo flanee, genere inercias que asociados a la dulzura de esa suspensión que se traga todo pueda generar alguna tendencia al mareo en ocupantes.
Maletero correcto, muy regular en formas para un coche de 4,7 metros y también, no podía ser de otra manera, con boca de carga alta y portón que agradecería subir algún centímetro más su altura al abrirse.
GWM Wey 03: así va
Dinámicamente nos quedamos con esa dulzura de funcionamiento en modo normal, apoyada por un notable trabajo de insonorización acústica. Carácter tiene de sobra a golpe de pedal derecho que busca el brío de un motor 2.0T combinado con un cambio de doble embrague de nueve relaciones y con uno -2WD- o dos motores eléctricos -AWD-, que a su vez se traducen en 270 o 325 kW de potencia total, lo que traído a caballos de los de siempre son 365 o 440 CV para los que gusten del dato.
A cambio, hay que mover más de 2.100 kg de peso y esto, una vez que se gaste la autonomía eléctrica debe disparar consumos de gasolina convencional para un depósito generoso de 55 litros. Cierto es que éste es un coche para abusar de su electrificación y autonomía de 124 o 136 km según elijamos 2WD o AWD, aunque los consumos eléctricos homologados no sean para nada referentes -24/25 kWh/100 km-.
Recordemos que hasta ahora el líder de la autonomía PHEV era el Mercedes GLC con 130 km. Además, este Wey 03 suma la posibilidad añadida de tragarse recargas a 50 kW como complemento a los cargadores domésticos, que deberían ser su hábitat natural. En cualquier caso autonomía combinada de unos 610-625 km que ya te ofrecen la tranquilidad de ir de tirón a cualquier destino de media y larga distancia. Cinco modos de conducción -Normal, EV, Sport, Charge y Snow- asociados a tres tarados de recarga en las deceleraciones.
¿Triunfará este GWM WEY 03 y sus soluciones PHEV? Si el precio de 45.000 euros como punto de partida se mantiene es verdad que objetivamente puede merecer la pena -autonomía, calidades, espacio, carga de seguridad…-, claro que a cambio tampoco la diferencia de precio frente a rivales con más imagen de marca es escandalosa, lo que a más de uno le puede hacer dudar si dar la oportunidad a esta propuesta china.
La marca está empezando y habrá que darle un margen aunque yo particularmente preferiría 150 CV menos y un precio más ajustado para seducir a los potenciales clientes. Preguntamos si esta plataforma podría admitir soluciones híbridas convencionales, más acordes con nuestros mercados, y se me dice que sí pero que no se contempla una implementación HEV de momento. GWM cree en Wey y en la calidad de su producto y así lo demuestra con sus cinco años de garantía total.
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