El Seat Arona es la primera apuesta del fabricante en la categoría de los SUV urbanos, y ya se ha convertido en todo un éxito en el continente europeo. Desde luego, lograr unas ventas que suben como la espuma no ha sido una tarea nada sencilla, puesto que tiene que medirse a rivales tan consolidados como los Renault Captur, Opel Mokka X o Peugeot 2008, además de los recientes Citroën C3 Aircross, Hyundai Kona, Kia Stonic y Opel Crossland X.
Construido sobre la plataforma modular MQB-A0, el Arona comparte multitud de elementos con el Seat Ibiza, algo que permite mantener los costes a raya para ofrecer un precio de venta más competitivo. En el frontal ambos muestran las mismas señas de identidad –con la posibilidad de incorporar ópticas Full LED–, aunque existen diferencias en zonas como el capó o el paragolpes. En la zaga, cada uno tiene su propia personalidad gracias a unos pilotos específicos, mientras que de perfil son prácticamente calcados; este último aspecto se debe a su similitud en las puertas, si bien el Arona añade una franja decorativa en el pilar C que le otorga un aspecto más «offroad» y evita la sensación de estar ante un Ibiza sobreelevado.
Ya en el interior, las diferencias entre ellos vuelven a ser casi imperceptibles, destacando su pantalla táctil de hasta ocho pulgadas y el nuevo cuadro de instrumentos Digital Cockpit. Los materiales empleados distan de ser lujosos –utiliza plásticos duros–, pero su nivel de acabado resulta satisfactorio, así como los ajustes entre las piezas. Para mejorar estas sensaciones, la parte central del salpicadero puede emplear un tapizado a juego con los asientos. En lo referente al aspecto práctico, el Arona se encuentra en una buena posición respecto a sus rivales y sobresale por la capacidad del maletero -400 litros-.
- Más información: Analizamos el Seat Arona en vídeo
Bajo el capó, encontramos una gama mecánica muy equilibrada, capaz de satisfacer un amplio abanico de necesidades. Así, en gasolina dispone del propulsor turboalimentado 1.0 TSI con dos escalones de potencia -95 y 115 CV- y el potente 1.5 TSI EVO de 150 CV. Una de las novedades de la gama 2019 es la denominación OPF, que hace referencia a la utilización de un filtro de partículas en todos los casos. Por otra parte, en diésel ofrece el motor 1.6 TDI -con 95 o 115 CV- con el sistema SCR de Reducción Catalítica Selectiva y AdBlue. Los bloques a partir de 115 CV incorporan una caja de cambios manual de seis relaciones –cinco en el resto-, aunque se puede optar por una alternativa automática de doble embrague DSG con siete relaciones para el TSI de 115 CV y el TDI de 95 CV. Para ahorrar combustible, la tecnología Stop & Start está presente en cualquier opción que escojamos, y es capaz de apagar el motor antes de que se detenga por completo. Además, el cambio DSG dispone de un sofisticado modo de circulación a vela que reduce el consumo de combustible.
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Mención aparte merece la nueva variante 1.0 TGI de gas natural con 90 CV -asociada a una caja manual de cinco relaciones-, una combinación ya conocida en el Seat Ibiza TGI. Esta versión se beneficiará de la etiqueta ECO de la DGT, por lo que tendrá bonificaciones al aparcar en zonas de estacionamiento regulado y evitará restricciones de circulación en episodios de alta contaminación. Asimismo, su bajo coste por kilómetro le situará como una de las opciones más económicas de la gama.
En el apartado tecnológico están presentes los últimos equipamientos en asistencia a la conducción. Ejemplos de ello son el control de velocidad adaptativo ACC con función Stop & Go, sistema Front Assist con frenado autónomo de emergencia y reconocimiento de peatones, detector de vehículos en el ángulo muerto, alerta de fatiga o el dispositivo de aparcamiento asistido «Park Assist». En materia de conectividad destacamos el sistema Full Link compatible con Android y Apple y la posibilidad de acceso a internet. Y para que veas que no tiene nada que envidiar a los segmentos superiores, también está disponible un avanzado equipo de audio Beats y el acceso y arranque sin llave.
En lo referente a su seguridad, el Seat Arona cuenta con una buena batería de ayudas electrónicas, entre las que sobresalen el ESP, el control de tracción ASR, la función EDS, el diferencial XDS o el frenado muticolisión. Su comportamiento en carretera resulta muy equilibrado por su relación entre confort y estabilidad, aunque podemos mejorarlo aún más con la suspensión adaptativa Dual Ride asociada al selector de perfiles de conducción. Este modelo ha conseguido una calificación de cinco estrellas en los test de choque Euro NCAP gracias a la utilización de aceros de alta resistencia, los pretensores de los asientos exteriores y los seis airbags para una protección óptima de los pasajeros.
En definitiva, estamos ante uno de los productos más equilibrados del segmento de los SUV urbanos y otro acierto más por parte del fabricante español. Eso sí, próximamente tendrá que enfrentarse a otro rival de cuidado con el que compartirá plataforma y motores: nos referimos al Volkswagen T-Cross. ¿Qué modelo conseguirá un mayor volumen de ventas? Pronto lo sabremos…
