Ya se admiten pedidos, desde 23.500 euros

Primera prueba del Volkswagen T-Roc

Enrique Espinós
Enrique Espinós
Basado en la plataforma del Golf, este SUV de 4,23 m de largo y hasta 445 l de maletero llegará a los concesionarios a finales de noviembre. Está disponible con motores gasolina y diésel de 115 a 190 CV y versiones de tracción delantera y total.


Volkswagen llega por fin al segmento de los SUVs urbanos. Y lo hace aterrizando en un segmento cada vez más poblado, y donde prácticamente todas las marcas quieren su parte de pastel. La marca de Wolfsburgo, sin embargo, no ha lanzado un SUV urbano al uso -derivado de un urbano y con unos 4,15 m de largo- sino que su estrategia pasa por lanzar primero este T-Roc -de 4,23 m de longitud- que, por tamaño, se posiciona como rival directo de los SUV urbanos de mayor tamaño, como el Opel Mokka X -con 4,27 m-, Fiat 500X, Audi Q2 o Toyota C-HR. Más adelante, ya en 2018, lanzará el Volkswagen T-Cross, cuyo tamaño rondará los 4,10 m de longitud convirtiéndose en un rival directo de los todo caminos urbanos más compactos y populares, desde las últimas novedades como el Hyundai Kona, el Kia Stonic o el Citroën C3 Aircross a los súperventas Renault Captur o Peugeot 2008. Así, para el T-Roc Volkswagen ha recurrido a la plataforma MQB, la misma que utiliza el Golf y otros todo caminos de la marca como el Tiguan; mientras que el futuro T-Cross recurrirá a la plataforma MQB A0, la que utilizan el Seat Ibiza o el Volkswagen Polo.

Volkswagen T-Roc

Volkswagen T-Roc: exterior e interior

Con una distancia al suelo de 16,1 cm -más bien baja- el T-Roc acentúa un aspecto de SUV deportivo, que remarca con unos voladizos cortos, unos prominentes pasos de rueda y un frontal diferenciado de otros VW, con una parrilla muy destacada. VW lo ofrece en España en once colores de carrocería y, siguiendo la tónica de la personalización permite combinarlo con dos colores del techo -varía el color del mismo, pero también el de las carcasas de los retrovisores y el del pilar A– para el acabado Style -blanco y negro- y una -negro- para el acabado Sport. Además, en el interior, existe un panel decorativo que recubre la parte frontal del salpicadero que, junto a unas molduras en la parte superior de las puertas, también pueden ir en color a juego con la carrocería exterior: en el acabado Style, en cuatro tonos -azul, amarillo, gris oscuro y naranja-; en el Sport, estas molduras son en gris oscuro. En total, el VW T-Roc puede adquirirse en hasta 80 combinaciones.

En lo referente al habitáculo, el T-Roc ofrece un interior con un diseño basado en el VW Polo -en su acabado Sport, incluye de serie el cuadro de mandos digital estrenado en el restyling de este urbano- y que resulta amplio, especialmente en altura -delante, no tendrán problemas adultos de hasta 2 m de alto-. Sin embargo, a algunos ocupantes, puede parecerles algo más pequeño de lo que es en realidad. ¿El motivo? Respecto a otros de sus vehículos, VW ha aumentando ligeramente la altura del salpicadero lo que, junto a una luna delantera tendida pero algo más estrecha de lo habitual, proporciona una sensación, al menos al entrar, de espacio más constreñido. Algo que se ve reforzado por las ventanillas laterales que, debido a una línea lateral de la carrocería elevada, resultan algo pequeñas. Se trata de una sensación que desaparece al conducir el vehículo unas horas. En cuanto al espacio atrás, la distancia disponible para las piernas es correcta -en este modelo, las plazas traseras no se puedes deslizar longitudinalmente- y la altura, suficiente para adultos de hasta 1,90 m. En cuanto a la anchura, de nuevo está en la media, pero la forma elevada y estrecha de la plaza central trasera unida a la presencia de un pronunciado túnel de transmisión hace que, en dicha plaza, sólo pueda viajar cómodo un niño pequeño.

Una de las grandes bazas del T-Roc es el maletero. Ofrece 445 l de capacidad en las versiones de tracción delantera y de 392 l en los modelos con tracción total -debido a la presencia del diferencial Haldex-. Se trata de unas buenas cifras que se complementan con la presencia de argollas en los laterales o ganchos para sujetar las bolsas de la compra.

Volkswagen T-Roc

Volkswagen T-Roc: motores y acabados

Volkswagen ofrece el T-Roc con dos seis motorizaciones, tres de gasolina y tres diésel; todas turboalimentadas. Las primeras son un 1.0 tricilíndrico 115 CV, un 1.5 TSI de 150 CV y un 2.0 TSI de 190 CV; las segundas, un 1.6 TDI de 115 CV y un 2.0 TDI en potencias de 150 y 190 CV. Los propulsores de 115 CV irán únicamente asociados a la tracción delantera y un cambio manual de seis marchas, mientras que los motores de 190 CV se ofrecerán de serie tracción total 4motion y caja automática secuencial de siete velocidades DSG. Por su parte, los motores de 150 CV podrán contar, en opción, bien con caja automática, bien con tracción integral; o bien con ambas características. Por ahora, VW sólo ofrece en España los propulsores gasolina de 115 y 190 CV y el 2.0 TDI de 150 CV; el resto de motores estarán disponibles en los próximos meses.

A su vez, esta gama mecánica se combina con tres acabados: Advanced, Style, más orientado hacia el equipamiento y personalización; y Sport, el más deportivo. El acabado ´básico´ ya viene bien equipado y presenta elementos como seis airbags, ESP, frenada automática de emergencia, alerta por cambio de carril involuntario, control de crucero adaptativo, clima bizona, sensores de aparcamiento delantero y trasero, cuatro elevalunas, sensor de lluvia y luces, conectividad Android Auto y Car Play, Bluetooth, llantas de 17″€; mientras, el Style, que supone 600e más que el Advance, añade elementos como la pintura bicolor exterior o inserciones interiores en cuatro colores.

Por su parte, el acabado Sport -1.300 euros más que el Style- incluye luces led, cuadro de relojes digital, llantas de 17″ oscurecidas, cámara de visión trasera y carga de smartphone por inducción; además de detalles deportivos como asientos específicos, faros traseros oscurecidos, cristales posteriores tintados o pedales de aluminio. Las versiones Sport también incluyen de serie un mando para seleccionar el perfil de conducción hasta en cinco modos: Confort, Normal, Sport, Eco e Individual. Por último, todas las versiones con tracción total incorporan de serie un mando que permite regular la respuesta del control de tracción y de los frenos. Ofrece dos modalidad para asfalto -normal y nieve- y dos para circular por fuera de él: off-road y off-road Individual.

Volkswagen T-Roc

Volkswagen T-Roc: así va

Durante la toma de contacto con el T-Roc en Lisboa, pudimos conducir dos versiones: el 2.0 TDI 150 CV y el 2.0 TSI 190 CV, ambas con cambio automático DSG y tracción 4×4. En los dos vehículos, queda muy claro que el VW T-Roc parte de la plataforma del Golf, y como el compacto alemán, ofrece un comportamiento neutro, eficaz y seguro en todo momento. Se trata de un coche con el que se puede circular rápido de forma fácil y confortable, que no exige especiales dotes a su conductor.

Una de las causas más destacables de lo anterior es su suspensión, con una puesta a punto excelente que absorbe con eficacia cualquier irregularidad del terreno -no es un coche rebotón ni seco, incluso sobre firme muy irregular o roto- mostrando una amortiguación más bien firme. De igual forma y en carreteras con curvas, la suspensión limita muy bien los movimientos de la carrocería, de forma que el T-Roc apenas cabecea al frenar -hemos tenido esta sensación tanto con el motor gasolina como con el diésel- y sus pasajeros no notan apenas balanceos laterales. En ese aspecto, es uno de los mejores SUV del mercado.

Por otro lado, su dirección es directa -ofrece 2,5 vueltas de tope a tope- y, aunque no resulta especialmente comunicativa, sí es rápida y precisa. Por su parte, los frenos también ofrecen una muy grata respuesta por tacto como por potencia, ofreciendo una mordiente muy dosificable e intuitiva. En cuanto al cambio, la caja DSG sigue siendo una referencia por rapidez.

Volkswagen T-Roc

El T-Roc 2.0 TDI 150 CV nos ha parecido una versión muy equilibrada. De entrada, no resulta un motor muy ruidoso, ni se perciben apenas vibraciones en el interior del vehículo. Además, ofrece una buena respuesta ya desde 1.500 rpm que mantiene hasta pasadas las 4.000 rpm.; unido al cambio DSG, ofrece una conducción muy relajada. En cuanto a consumos, la versión probada incorporaba la tracción total, con lo que su peso ascendía a 1.530 kg€ y, eso, se nota. En autopista logramos unos correctos 6,2 l/100 km, que ascendieron a 7,7 l/100 cuando circulamos, de forma dinámica, por carreteras de media montaña.

En cuanto a la versión gasolina de 190 CV, no nos ha parecido tan recomendable. Resulta algo ruidoso al arrancar y al acelerar a bajo régimen, pero se torna muy silencioso fuera de estas circunstancias. Con una respuesta destacable a partir de 1.800 rpm, su empuje resulta muy líneal, casi demasiado para lo que se espera de una mecánica que, a priori y por potencia, debería ser la más deportiva de la gama. En cambio, no ha ofrecido unos consumos desmesurados –recordamos, lo probamos con cambio automático y tracción total-: en autopista logramos unos asumibles 7,2 l/100 km.

Volkswagen T-Roc

Ficha técnica de la versión recomendada por Autofácil: VW T-Roc 1.0 TSI 115 CV 4×2 Advanced Style

  • Precio: 24.475 euros
  • Motor: Gasolina, 1.0 turbo, 3 cil. en línea; 115 CV a 5.000 rpm; 200 Nm de 2.000 a 3.500 rpm
  • Cambio: Caja manual, 6 velocidades
  • Tracción: A las ruedas delanteras
  • Prestaciones: 0 a 100 km/h en 10,1 seg.; vel. máx.: 187 km/h
  • Consumo: 5,1 l/100 km
  • Peso: 1.270 kg

LO MEJOR Y LO PEOR

+ Puesta a punto de la suspensión, imagen, posibilidades de personalización.
– Plásticos interiores mejorables, falta de modularidad interior, visibilidad trasera.

 

Volkswagen T-Roc