El listón dejado por el Bugatti Veyron estaba alto. Muy alto. Sin embargo, tras meses de rumores, fotos y vídeos espía y confirmaciones, el momento ha llegado: ha sido presentado el Bugatti Chiron. El flamante sucesor del Veyron, presente en el Salón de Ginebra, se muestra como una evolución de éste en todos los aspectos y, por si alguien dudaba de su exclusividad, Bugatti ha eliminado esas dudas con una producción limitada a tan solo 500 unidades, entregándose las primeras en otoño de este mismo año. En cualquier caso, costará 2,4 millones de euros -antes de impuestos-, sin duda un hándicap a tener en cuenta antes de adquirirlo.
Bugatti Chiron: Diseño
Como era de esperar, su diseño exterior no supone una ruptura con respecto al Veyron, con el que mantiene similitudes en sus formas. No obstante, el Chiron cuenta con un chasis monocasco de fibra de carbono, lo que le hará reducir drásticamente su peso -el dato aún se desconoce-, además de aumentar su rigidez. Con una imagen parecida a la del concept car Bugatti Vision Gran Turismo, se ve marcado por una especie de ´C´ en los laterales, que va desde el techo hasta el suelo.
El frontal, además de por la característica parrilla de Bugatti, está caracterizado por sus pilotos, divididos en cuatro. Sin embargo, en la trasera hay más ´chicha´: integra un único y fino faro que recorre la zaga horizontalmente, llamando la atención con su color rojo sobre el fondo oscuro. También es remarcable su difusor, con dos salidas de escape dobles integradas en la zona central. Indudablemente, es un modelo que se muestra agresivo, pero elegante a la vez. Por otro lado, mide 4,54 m de largo, 2,03 de ancho y 1,21 de alto.
Bugatti Chiron: Interior
El habitáculo está construido con los mejores materiales. De hecho, su producción artesanal se combina con la utilización de las tecnologías más punteras. Uno de los elementos dominantes, piel aparte, es la fibra de carbono, presente en el salpicadero, volante y guarnecidos de las puertas. Bugatti también ha intentado reducir al máximo los controles presentes en la cabina, quedando así una consola central muy limpia, con únicamente cuatro botones, el ´warning´ y el pomo del cambio de marchas.
Una de las razones de la no instalación de una pantalla es el cuadro de relojes, donde encontramos uno analógico en el centro y dos displays digitales que informan de todo lo que concierne al vehículo. Igualmente, desde el volante se pueden manejar la gran mayoría de controles, por lo que la inclusión de más botones en la consola central sería redundante.
Bugatti Chiron: Motor
Todo lo anterior no sería nada sin la parte más interesante de este híper deportivo: su propulsor. Se trata de un bloque de 8 litros con 16 cilindros en disposición de W y cuatro turbos, que deja muy atrás los 1.001 CV del Veyron -aunque su motor ha servido como base-, ya que desarrolla la impresionante cifra de 1.500 CV de potencia a 6.700 rpm. Por su parte, el par motor máximo llega hasta los 1.600 Nm entre las 2.000 y las 6.000 rpm. La transmisión encargada de transmitir toda esta fuerza a las cuatro ruedas es una caja automática DSG de doble embrague.
Con estas especificaciones, el Bugatti Chiron alcanza una velocidad máxima de 420 km/h y completa el 0 a 100 km/h en 2,2 segundos, el 0 a 200 km/h en 6,5 segundos? y el 0 a 300 km/h en 13,6 segundos. Por último, los frenos derivan de la Fórmula 1, y están contenidos dentro de unas ruedas Michelin creadas especialmente para el modelo, de 20 pulgadas en el eje delantero y de 21 en el trasero.
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